Este es un templo católico dedicado a San Francisco de Asís, y representa un magnífico ejemplo de la arquitectura de la época. La historia cuenta que en 1549 se comenzó la construcción del primer templo, pero una fuerte nevada causó el derrumbe de la estructura, lo que retrasó significativamente su edificación, no fue hasta 1744 que finalmente se retomó la construcción y tomó un total de 40 años.
La Basílica se ubica en el centro de la ciudad y se ha convertido en un punto de encuentro tanto para los residentes de La Paz como para los visitantes extranjeros que lo frecuentan a diario. En 1948, fue declarado Basílica Menor, y su diseño incluye tres cuerpos, una cúpula de media naranja y un escudo de la Orden Franciscana coronando la nave central. Algunos elementos destacados de esta iglesia son: El retablo, que es famoso por su intrincado tallado con la técnica conocida como "Pan de Oro", esta técnica emplea una fina lámina de oro, tradicionalmente usada para decorar diversas obras artísticas como esculturas, cuadros, orfebrería y mobiliario, en segundo lugar la portada tallada en piedra de la Basílica de San Francisco es de estilo barroco mestizo, cuenta con elementos como; una figura femenina que representa la fertilidad, el hombre verde (pijchando coca), el león, el buey, el ángel y el águila que representan a los 4 evangelios, entre otros elementos que son representativos del sincretismo que trata de armonizar la religión católica con la cosmovisión andina, por último el retablo mayor y la mayoría de los púlpitos que se encuentran en el interior de la basílica están trabajados en madera de roble aplicado por su exterior a través de la técnica del pan de oro y que se construyó in situ, por tal motivo encaja perfectamente con los espacios en el altar.